Valle de Tlacolula
El Valle de Tlacolula está ubicado al oriente de la ciudad de Oaxaca de Juárez. El valle alberga los sitios prehispánicos de Mitla y Yagul, así como lo que se dice que es el árbol más grande del mundo. Muchos de los mejores tejidos que verás también se pueden encontrar en este valle. De hecho, se considera que algunas de las comunidades con las que trabajamos tienen las culturas de tejido más famosas de México.
En nuestros recorridos obtendrá información única sobre las culturas y estilos de vida de nuestras comunidades asociadas. Siga leyendo para saber dónde trabajamos y para obtener más información sobre cada comunidad.
Oaxaca, México
Nuestras comunidades asociadas
Teotitlán del Valle
De Náhuatl, Teotitlán significa: “Tierra de Dioses”. Es considerado el primer pueblo en el area fundado por los zapotecas. La lleyenda dice que los zapotecas cruzaron la montaña llamada Picacho (que se puede ver desde el atrio de la iglesia), miraron hacia abajo desde su cima y eligieron establecerse en el valle de abajo.
Teotitlán es famoso por sus tejidos, que han sido una actividad artesanal popular desde la época prehispánica. Los españoles introdujeron el telar y el hilo de lana, que los zapotecas incorporaron a su tradición de tejido existente, lo que dio como resultado los hermosos tapetes (alfombras) que se producen hasta el día de hoy. La mayoría de la gente en Teotitlán habla tanto zapoteco como español.
En Teotitlán trabajamos con muchos tejedores artesanales increíbles, así como con mujeres que crianza pollos, venden productos en el mercado, tienen pequeños escaparates y más.
San Sebastián Abasolo
No hay documentos históricos que digan exactamente cómo se fundó Abasolo, pero hay tres lugares en el pueblo donde se han encontrado artefactos precoloniales. Los actuales pobladores del pueblo consideran al cerro Danni Yeri un sitio histórico porque cerca del arroyo hay un túnel, por el que creen que los pueblos antiguos utilizaban para viajar a las tierras de Zaachila, un pueblo oaxaqueño a unos 20 kilómetros de distancia.
Durante algún tiempo, el terreno donde se asienta Abasolo se consideró parte del territorio de San Jerónimo Tlacochahuaya. En 1670 los nativos de Tlacochahuaya comenzaron a construir chozas en los campos para cuidar sus animales y cultivos. A lo largo de los años se formó una comunidad completamente nueva. En 1878 se funda oficialmente San Sebastián Abasolo y deja de pertenecer a Tlacochahuaya.
El pueblo es en gran parte agrícola y se especializaron en la producción de frijoles, ajo y chiles de agua (usados para hacer el platillo chiles rellenos). También es común para las familias críar borregos, gallinas, cabras, toros y otros animales en sus transpatios. Muchas mujeres en Abasolo producen el famoso queso fresco oaxaqueño, un queso fresco salado.
San Marcos Tlapazola
Tlapazola fue fundada en 1685, aunque hay algunos indicios de que la gente se había asentado allí antes de esa fecha. Casi toda su población (aprox. 1000 habitantes) es indígena y habla zapoteco.
Su nombre proviene del nombre de uno de sus santos, San Marcos Evangelista y Tlapazola, que significa "lugar de la codorniz" (lugar de las codornices). No hay mucha información sobre el origen de este nombre.
Las principales actividades económicas en Tlapazola son la agricultura y la producción de barro rojo, la cual es cada vez más reconocida. Una gran parte de la población está en los Estados Unidos, muchos trabajando para enviar dinero a Tlapazola.
Cada año, San Marcos Tlapazola celebra la Feria del Barro Rojo (fiesta del barro rojo) hacia el final de la Guelaguetza (julio).
San Miguel del Valle
San Miguel del Valle es una comunidad zapoteca y el zapoteco sigue siendo el principal lenguaje en la mayoría de las personas. A pesar de que solo están separados por 15 km, los zapotecas en San Miguel del Valle y Teotitlán del Valle tienen dialectos claramente diferentes.
Muchos de nuestros emprendedores en San Miguel son artistas del bordado. Al entrar en la ciudad, no puedes dejar de notar los llamativos atuendos que usan todas las mujeres de la comunidad. El traje típico en San Miguel incluye vestidos de colores brillantes con faldas elaboradamente plisadas y delantales ricamente bordados. Aunque este no es el traje tradicional de San Miguel, es el traje típico y es distintivo de este pueblo. Si conoces la zona, puedes mirar alrededor de un gran mercado y ver de dónde son las diferentes mujeres por el corte de su vestido y el estilo de su delantal.
Según nuestros empresarios , no fue hasta finales del siglo XX que San Miguel desarrolló su casco urbano. Hasta ese momento la mayoría de la gente de la comunidad vivía y trabajaba en ranchos y fincas en las faldas de la cordillera de la Sierra Norte. Alrededor de la década de 1970 convergieron varias fuerzas que alentaron a la gente a comenzar a construir casas en la ciudad. El comercio de tejidos en San Miguel se estaba desarrollando en ese momento, brindando a los residentes una forma de ganar dinero dentro de sus hogares en lugar de en el campo. Los hombres también comenzaron a ir a los EE. UU. a trabajar en mayor número y el dinero que enviaron ayudó a pagar la construcción. Al mismo tiempo, los servicios como la electricidad y el agua también estuvieron más disponibles en la ciudad.
En San Miguel trabajamos con una mezcla de artesanos (tejedores, costureras y bordadoras) y mujeres cuyos negocios atienden a la comunidad local (mujeres que hacen tortillas y tamales, crían pollos, tienen pequeñas tiendas y más).
Santa Ana del Valle
Santa Ana del Valle es una pequeña comunidad zapoteca en el Valle de Tlacolula a 35.2 km de la ciudad de Oaxaca, con aproximadamente 2,179 habitantes. Al igual que otros pueblos de los alrededores, Santa Ana del Valle es conocida por sus tapetes de lana que son tejidos 100% a mano en telares de pedal. Sin embargo, además de tejer, algunos de los nuevos participantes de En Vía también tienen diferentes negocios: tiendas de conveniencia, granjas de pollos, panaderías, venta de productos lácteos, decoración, papelería, entre otros.
Están muy orgullosos de ser el primer pueblo de Oaxaca en abrir un museo comunitario ubicado en la plaza principal del pueblo, tiene un nombre zapoteco Shan Dany (Bajo el cerro). La idea del museo comunitario es que las piezas arqueológicas encontradas permanezcan en el pueblo de origen como parte de su patrimonio cultural en lugar de ser llevadas a otros museos más grandes. Además de las piezas arqueológicas, el museo comunitario de Santa Ana está dedicado a la Revolución Mexicana, su danza representativa, la Danza de la Pluma y los procesos de elaboración de tejidos de lana del pueblo.
Al igual que otras comunidades de la región, en Santa Ana los textiles de lana tejidos en telar de pedal son una tradición heredada por generaciones. Solían tejer únicamente con lana de color natural, combinando los diferentes colores directamente de las ovejas, para conseguir los diseños que querían. Actualmente la comunidad está interesada en conservar los diseños originales, probar nuevos diseños y aprender teñidos naturales para hacer menos teñidos químicos. Las mujeres de Santa Ana del Valle son una muestra de fuerza y aliento para expandir sus horizontes.
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